En esta página veremos cómo funciona el llamado ASFA “analógico”, sistema que, recordamos, ya está fuera de servicio en la RFIG.
Vamos a ver cómo tiene que actuar el maquinista.
Vía Libre (y Paso a Nivel Protegido)

Si la señal está en Vía Libre, al pasar tanto por la baliza previa como por la baliza de pie de señal, el sistema emitirá un pitido de 0,5 segundos y el maquinista no tendrá que hacer nada.
Anuncio de Parada (y otras señales con amarillo)

Si la señal está en Anuncio de Parada (y todos los demás aspectos que he comentado antes, pero lo vamos a simplificar así), al paso por ambas balizas el sistema emitirá un pitido continuo y encenderá dos luces blancas o amarillas en el pupitre de conducción. Una es un pulsador que sirve como reconocimiento de la señal, es decir, que si lo pulso es porque soy consciente de que estoy viendo una señal restrictiva, y el otro es un pulsador que sirve para frenar de urgencia. Lógicamente, éste no se pulsa, salvo causa justificada. El maquinista tiene que pulsar el reconocimiento antes de 3 segundos. Si no lo hace, frenada de urgencia. Como estamos hablando del sistema original, aquí acababa la labor del maquinista con el ASFA. En los sistemas modernos de ASFA tiene que hacer más cosas, que veremos más adelante.
En ASFA AVE, al pasar por la baliza L1 ocurre lo mismo que antes, con la diferencia de que se inicia un temporizador de 23 segundos. Si tras ese tiempo, el tren circula a más de 160 km/h, el sistema aplica el freno de urgencia.
En la imagen sólo he puesto la señal de LTV, pero es por simplificar. Se entiende que me refiero a las señales de anuncio de LTV que supone un CSV o la señal de anuncio de CSV.
Parada (y otras señales con foco rojo)

Si la señal está en Parada, al paso por la baliza previa (frecuencia L7) se comprueba la velocidad a la que circula el tren. Si es inferior a la de control, sólo sonará un pitido durante 3 segundos y se encenderá una luz roja fija en el pupitre durante 10 segundos. Si la velocidad que llevamos es más alta que la de control, nos tirará urgencia.
La velocidad de control depende del tipo del tren. En la siguiente tabla podéis ver las velocidades de control.
Tipo de tren | Velocidad de control |
110 o superior | 60 km/h |
80, 90, 100 | 50 km/h |
50, 60, 70 | 35 km/h |
¿Y qué ocurre si rebasamos una señal en Parada? Pues que al pasar la baliza con L8, el sistema nos frenará de urgencia, sea la velocidad que sea a la que vamos, porque hemos pasado la señal sin poder hacerlo.
Pero hemos visto que hay casos en los que una señal en rojo se puede pasar. De hecho, hay una indicación, el Rebase Autorizado, que me permite rebasar la señal legalmente. En este caso, en el panel de ASFA tenemos una llave o un pulsador para poder rebasar las señales, que anula el sistema durante diez segundos.
Vía Libre Condicional

Para el caso de la señal en indicación de Vía Libre Condicional, se pueden dar dos casos: que el tipo del tren que llevamos sea igual o inferior a 160, o que el tipo del tren sea superior a 160.
Si el tipo es igual a 160 o inferior, el ASFA actuará como si la indicación de la señal fuera Vía Libre: un pitido de 0,5 segundos.
Si el tipo es superior a 160, sonará un pitido, se encenderá una luz verde intermitente en el panel y se encenderá el pulsador de reconocimiento. Si no lo pulsamos en tres segundos, el tren se detendrá. Una vez que pulsemos el reconocimiento, tendremos que reducir la velocidad a 180 km/h en 18 segundos y después a 160 en otros 11 segundos (29 segundos en total). Si no reducimos la velocidad en esos lapsos de tiempo, el sistema nos frenará de urgencia. Si reducimos más la velocidad de lo que nos exige el ASFA y en menos tiempo, evidentemente no pasará nada. Pero el sistema sigue sin supervisar la velocidad continuamente, sino que, puntualmente, pasados esos 18 segundos comprobará la velocidad y si es menor de 180 no hará nada, y pasados otros 11 segundos, volverá a comprobar la velocidad.

Muy interesante.